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Magazine Carabancheles y otras actividades

En muchos sentidos, el trabajo que estamos realizando desde Convergencia de las Culturas apunta a una imagen de futuro a la que ya le hemos puesto nombre: Nación Humana Universal. Y quizá porque esa imagen nos succiona es que podemos detectar algunos hechos que van apareciendo en el nuevo horizonte humano con los contenidos y significados propios de esa imagen.

Mostrar estos significados, contenidos y hechos de forma que se hagan “evidentes” para aquellos que, aunque intuyendo que algo bueno está por venir, no ven claro cómo pueden hacer, e incluso para aquellos otros que ahogados por un sistema inhumano no se plantean siquiera que pueda haber una salida, es la actitud que nos ha llevado durante este primer trimestre del año a llevar adelante una serie de actividades destinadas a cargar de significados el barrio y llenarlo de contenidos propios de esa Nación Humana Universal.

Comenzamos el año “adoptando” un árbol al que llamamos “el árbol de los deseos”, en un post anterior ya comentábamos cómo se desarrolló la actividad. Le siguió otro árbol al que bautizamos como “Árbol del Buen Conocimiento”, al que colgamos alrededor de su tronco una serie de tablitas con citas, aforismos y pensamientos de Silo y otros personajes que aportaron su sabiduría. A diferencia del anterior árbol, que apenas duró unos días, éste ya lleva un mes y medio adaptándose al paisaje barrial. Próximamente seguiremos cultivando nuestro bosque particular con otros árboles, como “el de las culturas”, “el del diálogo”, y así siguiendo.

Otra actividad ha sido la pegada de una serie de anuncios que no buscaban, ni pedían, ni alquilaban, ni compraban, ni vendían nada de nada, que es lo que cabe esperar de un anuncio. En nuestro caso sólo nos ofrecíamos: “Estrecho manos”, “Aporto otro punto de vista”, “Soy todo oídos (me ofrezco para escucharte)”, “Reparto sonrisas”, “Cocino esperanzas”… todos con ese trasfondo del dar desinteresadamente. No hay manera de medir cómo ha sido tomada esta actividad en la gente, pero las personas que leían los anuncios mientras los pegábamos nos miraban con una sonrisa cómplice, y hasta un vecino atrevido nos escribía: “Es alentador, y mas en estos tiempos, saber que hay personas que se preocupan por cambiar en positivo la convivencia vecinal y si es de forma desinteresada es digno de felicitación, así que he de unirme a quienes hayan pensado igual que yo en referencia a vuestra labor.”

Por otro lado, se ha puesto en marcha un magazine online para transmitir nuestras actividades, ideas y doctrina. Este magazín nos permite, además, tomar contacto con personas y grupos del barrio que destacan por alguna actividad, a través de entrevistas, artículos, vídeos, etc. También podremos llegar a cualquier vecino mediante encuestas, opiniones o acciones concretas. Se ha buscado darle a este magazine, más que un tono intelectual, un tono emotivo, casi poético, con poco texto y mucho de impacto visual, esperando que entre por otros sentidos que no son los habituales. Se puede ver el primer número en www.carabancheles.com.

Los seminarios en el Parque de Toledo junto a otros equipos de Madrid, la creación de un Taller de la Inspiración donde generar este tipo de actividades, la tendencia a que el local este abierto al barrio durante toda la semana, las reuniones semanales de Convergencia de las Culturas, el contacto directo con los vecinos… son elementos que están ayudando a generar dinamismo a aquella imagen que hablábamos al comienzo que nos succiona. A todo esto se lo ha acompañando de elementos de difusión como carteles anunciando el magazine, folleto del programa de actividades del mes, panel informativo en la puerta del local, etc.

En la ‘declaración de intenciones’ del equipo de Carabanchel, cuando en diciembre pasado nos hacíamos el proyecto para este año, nos decíamos:

“Nos emplazamos en un barrio del futuro, donde la gente se conoce y nos conoce; se saludan y nos saludan; se interesa y participa de nuestras actividades; nos facilitan la difusión y nos recomiendan a sus allegados. Y eso será porque ya no somos extraños o desconocidos, sino porque somos referencias ejemplares de un barrio dinámico, diverso,  solidario, creativo… vivo.”

Bueno, hacia allá vamos.